Ya sea en el Galpón Ocho; al lado de las carpas de Lavanda, instalados por un par de horas en algún pueblo olvidado levantando un show improvisado para cinco personas; o en el Club Beat, con el público que lo acompaña hace más de 20 años y que ya se han vuelto sus amigos. Ya sea enseñándole a Martillo a tocar sus primeras notas en una guitarra demasiado grande para él, o ensayando hasta altas horas de la madrugada con las tres personas que han sido su familia más que cualquier otro que comparta su sangre. La llamada de la música siempre es grande y resuena en su interior más fuerte que cualquier poder desviante. Sin embargo, ahora, no es solo la música. 

Galpón 8 por Ray of sand

Junnie discute con Lars sobre su última composición, pero lo único que ve Sid es un cabello rubio lleno de sangre y los brazos de un joven retorcidos de una forma inhumana. No eran ellos, aunque podrían haberlo sido. Sid ha participado en más de una pelea y carga con más muertes en sus manos que cualquiera de sus compañeros; no obstante, el sabor metálico de la sangre de esa batalla aún permanece en su boca y ninguna visita a terapia ha podido sacarlo de ahí. 

Simonon lo ayuda en cada una de sus crisis de pánico, y su experiencia con el tema evidencia los años acumulando amigos que no se han vuelto a levantar. Slayer está ahí cada vez que despierta de una pesadilla y su parche en el ojo es un recordatorio de la obligación de que cada pérdida debe valer la pena.  

Sid por Sergio Quijada

Magnus a veces se acerca entre conciertos para burlarse de él por su nueva vida familiar mientras bebe whiskey. Lo visita para extrañar a Sombra con la única otra persona que entiende no solo el dolor, sino también la rabia que amenaza con quemarlo todo cada vez que piensa en las mentiras y en los secretos. Nunca menciona a Espartaco y lo agradece, no es él quien tiene que lidiar con el conocimiento de que su padre ha estado vivo durante todo este tiempo. 

En el escenario no piensa en eso, ni en la batalla en la Patagonia que cambió las reglas del juego, ni en su hermano de tantas batallas que resultó ser una especie de Dios, ni en la oscuridad que parece envolverlo todo. Solo piensa en la música que lo conecta con cada una de las personas que lo escucha, una conexión que viene con la responsabilidad de liderarlos a través de un caos que esta vez no está de su lado.

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2 comments
  1. Genial pieza de LOre, ojala se vaya avanzando en la historia despues del premiere Alto VOltaje de cara al futuro
    Me gustó que se mencionaran a muchos personajes, y algunas conecciones entre ellos, como que se hablara de consecuencias de los sucesos de Colosos. Gracias por el relato!!

  2. Uuuuffff… Buenisima entrada de lore! Me gusta este Sid cada vez más humano junto a esta Acracia que nos muestra que es más una gran familia y no solo Ak-47’s y guerrillas.
    Al igual que el texto de Quimera, se agradece poder tener estos pedacitos que muestran las relaciones entre personajes diversos de por ahi y por allá.

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